Cuando llega la primavera y el verano el consumo de legumbres disminuye porque nos da pereza consumir platos tan contundentes y calientes como un cocido o unas lentejas.
Os propongo un par de recetas para disfrutar de los garbanzos también en verano, refrescantes, ligeras y muy fáciles de preparar. Ya no tienes excusas para no comer garbanzos cuando hace calor.
Ingredientes para 4 personas:
g de garbanzos, 1 berenjena, 5 tomates de pera maduros,
1 cebolla, perejil, ajo, sal, pimienta negra en grano y aceite de oliva.
noche antes, con la cebolla partida por la mitad hasta que estén tiernos.
Colarlos y apartarlos.
cucharadas de aceite. Añadir las berenjenas y seguir rehogando y luego los
garbanzos y continúa rehogando unos minutos más.
Aparta del fuego y añade el
perejil picado y los tomates cortados en medias lunas. Rectifica de sal y
espolvorea con la pimienta recién molida antes de servir.
Ingredientes para 4 personas:
Picamos el pimiento rojo en tiras, la cebolleta y el perejil. Mezclamos los garbanzos con el bacalao desmigado, el pimiento, la cebolleta y el perejil. Añadimos el aceite de oliva mezclamos bien y terminamos con el pimentón dulce.
Aparta del fuego y añade el perejil picado y los tomates cortados en medias lunas. Rectifica de sal y espolvorea con la pimienta recién molida antes de servir.
Información nutricional:
El garbanzo es una legumbre que aporta 340 kcal/100gr. Contiene 55 gr de hidratos de carbono complejos y 20 gr de proteínas vegetales por cada 100 gr y su contenido en fibra es de 14 gr. Esto hace que se sea un alimento ideal tanto para diabéticos, deportistas, …ya que los azúcares que contiene son de absorción lenta. Por su contenido en fibra es ideal para regular el tránsito intestinal y para mejorar los niveles de colesterol, ya que también contiene ácidos grasos insaturados.